Hace un tiempo se polemizó acerca de si la gastronomía era arte y, por lo tanto, los cocineros artistas. Fue a raíz de la invitación de Ferran Adrià al Documenta 12, la prestigiosa feria alemana de arte contemporáneo. Manuel Vázquez Montalbán la veía fuera de los museos, por ser demasiado efímera.
Hay quien dice que se está confundiendo arte con creatividad. La creatividad no tiene por qué ser arte, y viceversa. Un retrato pintado por encargo y que no tiene originalidad alguna no parece muy creativo, pero lo seguimos considerando arte.
En el mundo del jamón, también hay quien dice que el espectáculo de los grandes cortadores es puro arte, sobre todo cuando el que empuña el cuchillo se llama Florencio Sanchidrián, Nico Jiménez, o Pepe Alba. También los hay que se inspiran en el producto insignia de la gastronomía española para hacer sus creaciones, como el artista extremeño Manuel Mata.
Pepe Alba y Manuel Mata junto a un hueso de jamón hecho escultura (foto de Hoy.es)